Vivimos un auge de eventos musicales en el país y la realización de estos ya no se remite a una temporada específica, al contrario, podemos disfrutar de ellos durante todo el año y son los sonidos electrónicos los que tienen mayor protagonismo.

Tal quedó demostrado el caluroso fin de semana del 17 y 18 de noviembre, fechas en las que se realizaron dos grandes eventos electrónicos al aire libre: Creamfields  y Piknic Electronik. Como academia nos motivamos para bailar todo ese fin de semana y aportar con lo que mejor sabemos hacer: entregar conocimiento musical y cultura electrónica.

El sábado 17 teníamos una cita muy importante en el Club Hípico, la celebración de los 15 años de Creamfields. 35 mil personas llegaron al encuentro y tuvieron la experiencia de estar en uno de los festivales más famosos del mundo junto a los mejores exponentes de la música electrónica internacional. Armin Van Buuren, Carnage, Sigma y Matador, fueron los headliners de los 4 stages que sonaban de forma simultánea.

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DJ Wask, fundador y docente de la academia, fue uno de los invitados especiales para este aniversario y nosotros lo acompañamos durante su set, que por más de dos horas nos hizo bailar sin interrupción. Una fiesta calurosa con beats houseros inundó la carpa del Cream Arena, donde Wask dio cátedra en la práctica de todos los conocimientos que transmite a sus alumnos en la academia. Una propuesta sensible al ritmo de la audiencia, con un setup híbrido y la conjugación de track clásicos con temas inéditos.

El domingo 18 se activó el sector de las piscinas Tupahue para realizar Piknic Electrónik. Desde temprano sonaron melodías electrónicas que daban la bienvenida a los asistentes a este evento de perfil familiar y como Djschool quisimos estar ahí para entregar conocimiento musical a padres e hijos en una actividad musical donde se les enseñaba a mezclar música electrónica con equipamiento profesional y a cargo de  nuestros monitores djs.

En paralelo se vivía un panorama perfecto para terminar la semana, personas de todas las edades unidas por la cultura electrónica, bailando y disfrutando en naturaleza de la música de Amê y Nico Stojan. 

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Fue un memorable fin de semana de sonidos electrónicos, donde gracias a la trayectoria que arrastran estos dos festivales, vivimos experiencias de primer nivel. Nos sentimos muy afortunados de haber tenido presencia en ellos y haber aportado con música y aprendizaje. ¡Que vengan muchos más!